Toda celebración que se precie es también una buena oportunidad para degustar la gastronomía de la zona. Reuniones familiares, bares y restaurantes se dejan llevar durante las Fiestas del Pilar por los sabores y productos más tradicionales. Y si de algo podemos presumir en Zaragoza es de cocinar platos sencillos pero muy sabrosos que harán las delicias de autóctonos y forasteros.
Aquí van algunas recomendaciones para esos días:
1. El Ternasco de Aragón: el producto estrella
Son numerosos los establecimientos que ofrecen Ternasco de Aragón durante las Fiestas del Pilar. Esta carne de cordero, proveniente de razas autóctonas aragonesas, destaca por ser tierna y versátil. Por eso, aunque lo más frecuente es cocinarla al horno y acompañarla de patatas, podrás encontrarla de otras maneras: guisada, en forma de cachopo, en bocadillo, como albóndigas o croquetas.
2. Migas aragonesas
Las migas son otro de los platos por excelencia, por lo que tampoco pueden faltar en los días de fiestas. Cocinarlas es muy sencillo y, para ello, puedes utilizar ingredientes de calidad y proximidad, como la Cebolla DOP Fuentes de Ebro, el aceite de oliva virgen extra DOP del Bajo Aragón, además de uva, longaniza y huevos. Aunque esta es la receta más clásica, ¡hay tantas variantes como gustos en la mesa!
3. Pollo al chilindrón
Aunque más desconocido, este plato es uno de los más antiguos de la cocina aragonesa. El secreto de este guiso de pollo de corral se encuentra en la salsa, elaborada con tomate, ajos, cebolla, pimiento, vino blanco y jamón de Teruel.
4. Para los más lamineros
Entre los dulces destacados, no pueden faltar los Adoquines del Pilar, auténticos imprescindibles en las Fiestas del Pilar. Este icónico ladrillo de caramelo existe de muchos tamaños -hasta de 5 kilos- y de muy diferentes sabores; los más típicos de naranja, fresa, limón y anís… Mmmm, ¿los has probado? Además, su bonito envoltorio con la Virgen del Pilar recuerda a un cachirulo y su interior esconde una sorpresa, ¡la letra del estribillo de una jota!
Otro dulce que no puede faltar en un Pilar son las Frutas de Aragón: ¡el sabor natural de la fruta acompañado de chocolate es pura fantasía! Frutas confitadas o escarchadas, bañadas en chocolate negro, con un envoltorio característico de papel celofán de colores.
5. Un postre especial para el Día del Pilar
La sobremesa del 12 de octubre, Día del Pilar, tiene su particular postre: el tradicional manto de la Virgen, elaborado a base de hojaldre, nata y yema huevo en su versión más clásica, pero que admite diferentes rellenos, como crema pastelera o trufa.
6. Dos propuestas para la hora del vermut
Ya sea en casa o fuera, el aperitivo es uno de los momentos clave durante las Fiestas del Pilar. Dos de las tapas más emblemáticas de Zaragoza son el ‘guardia civil’ (un montadito que combina sardina rancia, pepinillo, pimiento y tomate, y que se ha popularizado con este nombre) y el jamón con chorreras. Este último es un rebozado de huevo duro envuelto en jamón y queso.
7. Y para terminar… los clásicos de las Fiestas
El rey indiscutible de las ferias es el algodón de azúcar, así que si subes al Recinto Ferial de Valdespartera, no puedes irte sin probar uno.
Tampoco puede faltar la típica patata asada, eso sí, antes tendrás que hacer una fila un poco larga para poder probarla, pero merece la pena, ¡la boca se nos hace agua! Y finalmente, un desayuno de los que reponen a cualquiera son los churros, ya sean para empezar el día o de vuelta a casa…
