Gigantes y cabezudos

La Comparsa de Gigantes y Cabezudos, la componen catorce Gigantes y los once Cabezudos, quienes desfilan animando las calles de la ciudad persiguiendo a pequeños y grandes.

El origen de la comparsa en Zaragoza se remonta al siglo XVI, cuando en las procesiones del Corpus se hacía desfilar a dos gigantes que, representando al bien, escoltaban de manera solemne el paso del Santísimo Sacramento, mientras que los deformados cabezudos, símbolo del pecado, huían despavoridos ante la presencia divina.
Uno de los desfiles dignos de recordar tuvo lugar en 1860, cuando la reina Isabel II visitó Zaragoza con motivo de las Fiestas del Pilar. Para tan insigne ocasión se preparó una lujosa cabalgata encabezada por los cuatro gigantes y cuatro cabezudos que entonces tenía la comparsa, vestidos caprichosamente con trajes a la moda traídos de París.
Los años fueron pasando y los cabezudos se hicieron tan conocidos y se identificaban tanto con la capital aragonesa que en 1929 la comparsa viajó a Barcelona con motivo de la Exposición Universal para representar a Zaragoza en el evento.
Los Gigantes y Cabezudos, todos ellos personajes populares e incluso personas reales que vivieron en la ciudad, bailan al ritmo de la música y encorren a los más pequeños por las calles de Zaragoza.
Desde que La Cigarrera se incorporó como miembro en el 2015, la comparsa está compuesta por 14 gigantes y 11 cabezudos, y se ha convertido en uno de los actos más populares de las fiestas para niños y mayores. Hoy, estas figuras no pueden faltar en las Fiestas del Pilar o en otras festividades de la capital aragonesa como San Valero.

El Berrugón

Al parecer representa a un antiguo corregidor de la ciudad, predecesor de los actuales concejales. Aquel antiguo munícipe tenía una pronunciada verruga, un rasgo facial que le ha dado personalidad y nombre propio.
Copla: "Al berrugón le picaron los mosquitos y se compró un sombrero de tres picos".

El Boticario

Lleva un batín a cuadros y un bonete cilíndrico. Su gesto iracundo y sus rasgos temibles provocan temor en los niños que le cantan.
Copla: "Boticario, canario, garras de alambre, le cayó una teja y no le hizo sangre"

El Tuerto

Su sombrero de estilo francés recuerda a Napoleón e incluso hay quienes ven en este personaje al rey intruso José Bonaparte, lo que le hacía objetivo de las más crueles burlas.
Copla: "El tuerto, tuerto es, el tuerto por melón se cayó un tozolón"

El Azutero

Pedro Nadal y Auré (el Royo del Rabal). Fue considerado como el más importante cantador de jota en su época y marcó un hito decisivo en la fijación de los diferentes estilos de este género del folclore aragonés.
Copla: "Azutero panzón deja de cantar jotas y reparte el zurrón"

El Forano

Un postillón de las antiguas diligencias que acude a las fiestas de Zaragoza con su mejor ropa de domingo, un sombrero de copa y una chaquetilla de pana. Los chavales se mofan de sus modales un tanto pueblerinos al son de:
Copla: "El Forano se ha ensuciao y la forana lo ha limpiao con un trapo colorao"

El Robaculeros

Representaba originariamente a Sancho Panza, el escudero de Don Quijote. Este cabezudo es el único de la comparsa que luce una barba. Los chicos de la ciudad suelen cantarle:
Copla: "El Robaculeros no sabe correr, por eso da tantos traspiés".

La Cigarrera

Representa a Herminia Martínez Linés, conocida como Serafina por estar casada con Serafín. Fue un personaje popular del siglo XX y XXI que forma parte de la historia de El Tubo , lugar en el que estuvo vendiendo cigarrillos desde los años 60.
Copla: La cigarrera/de tanto fumar/se tira pedos/que huelen fatal.

La Forana

El personaje de La Forana, que se incorporó a la comparsa en 1916, es la heredera de una antigua figura que representaba a Teresa Panza.
Copla: "Que no se diga, que no se note, que La Forana lleva bigote".

La Pilara

Es el único de los cabezudos de la comparsa que nació en vida de la persona a la que representa. El 10 de octubre de 1982 Pilar Lahuerta, cantante y humorista del famoso Teatro - Salón Oasis en el que actuó durante años con su compañero Susepet, asistió al bautizo de su propio cabezudo.
Copla: La Pilara, cuando camina, mueve las plumas como una gallina.

El Torero

Este diestro representa a un torero de la época de Pepe Hillo, Martincho y Josef Cándido, aunque su arrogancia y su porte taurino le hacen ser objeto de las burlas de los chavales.
Copla: "El torero como es tan chulo, salta la tapia y se rompe el culo".

El Morico

El origen de este cabezudo es, al parecer, un mozo de cuadra que se trajo desde Cuba un noble zaragozano, el Conde la Viñaza.
Copla: "Morico el Pilar, se come las sopas y se echa a bailar"